Act. Inicial. ¿Quién soy? —Artist SuHo.

𝐕𝐎𝐆𝐔𝐄 𝐌𝐀𝐆𝐀𝐙𝐈𝐍𝐄ᴿᴾ

🐰- Narrativa.

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🐰- Inicial. | ¿Quién soy?

》Artist. SuHo.

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¿Qué diferencias había entre el artista SuHo y el ciudadano común Kim Junmyeon? Sus allegados dirían que, en primer lugar Junmyeon estaba demasiado lejos de ser un humano común, el hombre nació en el seno de una familia honorable de prestigiosos magistrados, en la mejor zona comercial de Seúl, educado a la forma más tradicional, rodeado de todas las facilidades, SuHo por otro lado era uno de los elites de la empresa idol con la que firmó, un digno representante internacional, el encargado de las promociones educativas y culturales de la ola hallyu, simpleza claramente es una palabra que no puede ir del todo en sincronía a su ser. 

¿Entonces… se podría decir que es otra víctima del síndrome del idol? No, algunas veces se especuló ese rumor, envidiosos trataron de culparlo en situaciones que desconocía, inventando ridículas historias, tal la vez que se filtró supuestamente robaba calzado rentado para los escenarios y desfiles que le otorga la industria, no durando ni una hora la noticia amarillista, el señor poseía una colección de zapatos exclusivos, sus fans salieron a defenderlo, aquella colección valía unas diez veces más que los dizque robados, resaltando comentarios graciosos como que no iba a llevarse cosas que son más baratas de las que acostumbra.

Así que, ¿se trata de alguien que mira por encima del hombro? Tampoco, si bien se acostumbró a los lujos, sorpresivamente su estilo de vivienda entraba en los más sutiles, pequeños, hogareños, sencillos; un piso de departamento antiguo, de las edificaciones no modernizadas, o al menos por fuera, la zona se mantiene en perfecto estado a pesar de los años, con mínimas modificaciones como alarmas de seguridad, lectores de huella, cámaras ocultas, por dentro se aprecia un inmueble sin adornos extras, ni fornitura exagerada, no hay grandes aparatos, el baño es clásico, únicamente su colección de calzado y buena ropa es lo que podría decirse es cuantioso, después de todo, aunque colecciona no es un obsesionado de los bienes materiales, su alma disfrutaba más de las flores, las sonrisas de sus amigos, el amor de los animales, viajar, conocer otras culturas, ofrecer conocimiento.

Pero bueno, había elegido ser artista, sabiendo lo que conllevaría, la fama es un demonio hostil rodeado de males infinitos; acoso, exposición, mentiras, tretas, burlas, críticas, plagios, sobreexplotación, sólo por mencionar. Desde su entrenamiento conservó la idea de que nada es fácil, trabajando duro, sufriendo una lesión que lo aterró largo tiempo, según no podría bailar, vio luego que no pudo quedar en ninguno de los dos grupos que llamaron su atención, estaba enojado como lo haría cualquier humano, pero las recompensas llegan, siendo elegido como líder de una gran banda.

Tras el début las cosas no hicieron sino complicarse a pesar de que la fama subió como espuma, todo el peso recaía en él, experimentó el paquete completo de las peripecias de ser un rostro público, sin embargo el amor de la fanbase, el compromiso de sus compañeros, y su sueño de triunfar lo siguió llevando adelante.

De pronto el joven lesionado con falta de confianza se posicionó como uno de los mejores líderes, destacando además en áreas como actuación, musicales, ópera, modelaje, lanzando más tarde su carrera solista, no sólo eso, en lo personal se nutrió de mismo modo, perfeccionando su yoga, tomando cursos de idiomas, natación, clases de carreras, entre otros.

Por si fuera poco, en ningún momento dejó de lado sus creencias budistas, realizando en tiempo y forma también su servicio, creándose un dicho curioso entre civiles; quien diga que no conoce a EXO es un espía o quien diga que no conoce a SuHo no es de confianza. 

Modesto en lo importante, abochornado en cada reconocimiento de sus proyectos, su sonrisa suave adornaría todo el tiempo su delicado rostro, ganándose apodos como conejito, ángel, algodón. Y por supuesto tenía defectos, el más marcado probablemente su vanidad natural, o contar pésimos chistes.

Al final, Junmyeon y SuHo no eran tan distintos, ambos trabajan incansablemente, poseen una moral plausible, derrochan elegancia, la mayor diferencia vendría siendo dentro del Lore de su agrupación, donde en ficción posee el poder del agua y es un alíen protector universal… en la vida real, con esfuerzo podría protegerse, aun siendo fuerte, lo suyo es ser pacifista.

Por lo que una vez que el joven adulto camina lejos de un reflector de cualquier tipo, él mismo se planeta la cuestión más importante, esa que lo ayuda a seguir teniendo los pies en la tierra; quién soy yo.

… “¿quién soy yo?”, se pregunta mentalmente frente a un espejo en la mañana, sus pijamas son suaves, de aspecto vintage, a veces son de Star Wars, con cuidado lava su rostro, perezoso, con ganas de dormir más, recordándose la agenda que tendrá en la tarde, bostezando silencioso, riendo poco después al notar recién su cabello alborotado, yéndose alegre a la cocina, aprovechando el tiempo que le queda para relajarse, sus horarios suelen ser bastante pesados. Ese es Junmyeon, ese es SuHo, alguien que lucha por el bien, su propia felicidad, la de otros, y poder dejar un legado, una persona sensible a todo, dispuesto a ayudar, comprometido con cada marca, industria, y fanático que vaya hacia él.

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—Buenas tardes, quiero agradecer el reconocimiento de la prestigiosa revista Vogue, soy SuHo de EXO, me comprometo de lleno con la marca, sé que trabajaremos en armonía.